Torrisdale Bay, otra maravilla de playa en el norte de Escocia

Torrisdale Bay es una fabulosa playa de un kilómetro y medio de largo, con limpias arenas doradas. Tiene magníficas dunas, y a Torrisdale Bay se llega mediante un agradable paseo desde la pequeña población de Invernaver. Es algo más de un kilómetro desde  donde aparcamos hasta la playa, siguiendo el curso del río a través de un entorno precioso de dunas y río y mar.

Para llegar al inicio del paseo cruzamos el puente sobre el río Naver hacia el oeste – el río es famoso por la pesca del salmón -. Seguimos la carretera y tomamos el primer desvío hacia la derecha. Llegaremos enseguida a un grupo de casas. Allí dejamos el coche y para iniciar el paseo tenemos que atravesar una puerta de ganado. Esto al principio llama mucho la  atención porque en Escocia hay muchas rutas que están dentro de terrenos particulares. Pero no  hay ningún problema, abrimos la puerta  de acceso peatonal en el extremo norte del grupito de casas y la cerramos tras pasar.

Una vez en el campo, giramos a la izquierda sobre una subida para encontrar una pista que se dirige a la orilla. Seguimos la pista por la arena ya que hay marea baja y enseguida llegamos a la zona de dunas. Seguimos el río hasta su desembocadura y llegamos a la playa enseguida.  Es un arenal muy amplio y merece la pena pasearse tranquilamente por la playa. Una vez disfrutamos de la playa para el camino de vuelta lo hicimos desde el lado oeste, a través de las dunas. De esa manera cerramos un recorrido circular pasando entre varios lochs y llegando al punto de inicio.

Además de las propias dunas que alcanzan una cierta altura, las mejores vistas de la playa se pueden obtener desde ambos lados de la bahía. En el este la propia carretera A836 que viene de Bettyhill proporciona unas vistas magníficas  sobre la playa, las dunas y la propia desembocadura del río. Desde el lado oeste el acceso no es tan obvio. Hay que llegar al pequeño pueblo de Torrisdale y desde allí buscar una carretera que sale hacia el norte pegada a la bahía, que debido a su altitud proporciona unos panoramas también preciosos. Otro buen mirador es unos restos que hay en la zona oeste de la playa sobre un  promontorio, se ve perfectamente el muro de lo que debió ser una estructura en la edad de hierro.

Itinerario: