Una impresionante caminata en el Parque de Jotunheimen: Besseggen
Hoy hacemos una de las excursiones más conocidas – y concurridas - de Noruega. Discurre en el precioso parque nacional de Jotunheimen entre Gjendesheim y Memurubu. El sendero sigue una cresta en el lado norte del lago Gjende y ofrece vistas increíbles de todo el precioso lago, ya que se encuentra rodeado de picos de montañas glaciares. Con una distancia de aproximadamente 14 Km y una diferencia de desnivel de casi 800 metros, la caminata es medianamente dura y en algunos tramos es bastante aérea por lo que si tienes un vértigo exacerbado puede que no sea la más adecuada de este maravilloso parque nacional. No obstante a mí no me gustan demasiado las alturas y los tramos aéreos son lo suficientemente amplios como para que puedas sentirte cómodo.
Tardamos unas 7 horas en completar la caminata desde Gjendesheim a Memurubu. El sendero está bien señalizado y es fácil de seguir, y como hemos comentado está bastante concurrido en verano – la única época en la que se puede realizar -. Hay que tener en cuenta también la logística. El sendero de 14 Km es en un solo sentido, y hacer ida y vuelta sería una caminata muy larga y dura, difícil de completar en un día. También hay un camino llano que sigue la orilla del lago y que podríamos utilizar para retroceder pero seguiría siendo una ruta muy larga. Dado que el único punto accesible en coche es Gjendesheim hay dos opciones: se puede tomar el ferry hasta Memurubu y hacer el camino de vuelta andando o bien podemos caminar hasta Memurubu y volver en ferry. En nuestro caso optamos por tomar el ferry a primera hora de la mañana y así no tener la presión de tener que acabar la caminata a una hora determinada para tomar el ferry de vuelta.
Así pues dejamos el coche en el parking – de pago – de Gjendesheim , tomamos el ferry hasta Memurubu – que ofrece preciosas vistas desde el lago al recorrido que vamos a realizar – y comenzamos la caminata en Memurubu tras bajarnos del ferry. Nada más dejar el ferry nos metemos en un bosque y el sendero comienza a ganar altura. No mucho después el bosque termina y salimos por encima de los árboles a una zona donde ya hay unas primeras vistas de la zona del lago. En el primer kilómetro y medio de caminata subimos unos 400 metros por lo que las rampas son importantes. Así ganamos la cresta que será por la que discurramos a lo largo de la ruta. Desde la parte superior de la cresta al principio solo se ve una pequeña porción de lago, pero con las montañas que todavía conservan algo de nieve las vistas son preciosas, con un riachuelo y una pequeña cresta hacia la dirección por la que hemos ascendido.
Tras esta subida inicial el sendero se relaja en lo que a pendiente se refiere. El paisaje se vuelve más rocoso e impresionante. Según avanzamos se van abriendo vistas hacia el oeste hacia el final del lago Gjende, donde hemos dejado el coche. El sendero pasa junto a un pequeño lago, el Bjørnbøltjønne, y las vistas hacia el otro lado del lago Gjende son impresionantes. Esta parte de la caminata es bastante cómoda. La vista hacia el lago Ovre Leirungen – al otro lado del Gjende - con el riachuelo que desemboca en él es preciosa. Tras un último repecho el camino comienza a descender suavemente. Y al final del descenso pasamos por uno de los lugares más singulares de toda la ruta. A nuestra izquierda un lago elevado, el Bessvatnet, y a nuestra derecha unos cientos de metros por debajo del sendero, el alargado Gjende. Es un sitio precioso.
Desde aquí nos enfrentamos a la segunda subida más dura de la ruta. En un par de Km subimos otros 400 metros de altitud. Aquí el camino se desdibuja y vamos ascendiendo entre rocas por la cresta que se estrecha. A medida que ascendemos las vistas son espectaculares hacia atrás. La subida es dura y en ocasiones hay que trepar entre rocas. No obstante no hay que asustarse. Hemos visto varias familias con niños haciendo la ruta sin problemas. Tras pasar la parte más estrecha dela cresta llegamos a la zona superior donde nos encontramos en un inmenso pedregal y ya en una superficie muy ancha donde las vistas se desdibujan algo al principio. No obstante seguimos avanzando y llegamos de nuevo a una zona donde el sendero discurre por el borde del acantilado y las vistas son increíbles. Aparte del Gjende vemos otros lagos y montañas desde arriba… un verdadero espectáculo. Ésta es la zona más espectacular y con vistas más amplias de toda la ruta.
A partir de aquí el camino empieza a descender vertiginosamente y seguimos teniendo grandes vistas. Según descendemos el terreno comienza a ser más amable y podemos ver el lago Gjende desde su extremo oeste. También es una vista maravillosa. Seguimos perdiendo altura y finalmente llegamos al parking donde habíamos dejado el coche por la mañana. Las vistas siguen siendo excelentes hasta el final del recorrido. Hay que recordar que estamos en una zona de excepcional belleza, en el corazón del parque nacional de Jotunheimen, una zona virgen donde no hay apenas rastro de la presencia humana, salvo por el aparcamiento y el pequeño muelle para los ferries. Una caminata impresionante, de las más espectaculares que hemos podido hacer en Noruega por la continua sucesión de paisajes espectaculares que ofrece.
Itinerario de la ruta:
